El bienestar laboral en los momentos importantes
- Escrito por Laura Perea
- Publicado en Opinión
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Durante el confinamiento, uno de los sentimientos más recurrentes entre miles de empleados fue el miedo a perder su trabajo. Poco después fue sustituido por la respuesta de empresas responsables que buscaron mejorar las condiciones laborales y mantener esquemas que permitieran un balance entre el trabajo y la vida privada.
Las relaciones laborales de una empresa se han vuelto mucho más complejas en los últimos años. Los responsables de los recursos humanos debemos entenderlo para poder aplicar, eficientemente, no solo la normatividad laboral, sino que hay que desenmarañar el complejo sentir de las personas para descubrir la mejor manera de aplicar políticas, gestiones y soluciones que respondan a las nuevas necesidades.
A partir de julio de 2020, en plena pandemia, Estados Unidos registró el número más alto de renuncias en la historia de ese país. Alrededor de 4% de la fuerza laboral de ese país dejó de trabajar voluntariamente en sus empresas porque no estaban de acuerdo con las políticas y decidieron probar suerte en otro lado, arriesgándose a perderlo todo.
También puedes leer. La nueva paradoja laboral. https://revistafactorrh.com/opinion/item/7504-la-nueva-paradoja-laboral
Este fenómeno, al que se bautizó como “La Gran Renuncia” (Great Resignation en inglés), se replicó poco a poco en todo el planeta, obligando a las empresas e instituciones a adoptar visiones diferentes sobre el quehacer en materia de recursos humanos. Está claro que hoy las necesidades e intereses de los empleados han cambiado y es fundamental que las organizaciones respondan a esos nuevos requerimientos.
El propósito en la vida toma un significado trascendental, sustituyendo el del compromiso con la empresa. Ya no basta que el empleado “se ponga la camiseta” sino que se espera que ahora la institución “ajuste la camiseta” pensando en la persona y su entorno, no solo en el/ la “trabajador(a)”.
Un elemento crítico en esta nueva fórmula es el modelo híbrido de trabajo, en respuesta a la necesidad de un mejor balance en la vida de los colegas. El confinamiento demostró que bajo ciertas circunstancias y modelos se puede trabajar de manera efectiva desde otros lugares que no sean una oficina corporativa. El reto con el trabajo en casa es poder desconectarse en un mundo conectado, al no haber espacios diferentes, ni descansos tecnológicos, el burnout ha aumentado también.
El balance en la vida depende de cada uno de nosotros, sí, pero en esta nueva época, las empresas del mundo deben entender y valorar su influencia en las decisiones de las personas. Si las necesidades de nuestros clientes han cambiado, también lo han hecho las de nuestros colaboradores.
Hace muchos años que el banco dejó de centrarse exclusivamente en las ganancias económicas, enfocando también esfuerzos en el bienestar de sus colegas, porque hemos visto que ahí está la grandeza: en que ellos(as) puedan ver en HSBC un aliado en el desarrollo de sus mundos individuales.
En los últimos meses hemos analizado la oferta de valor para nuestros(as) colegas, teniendo como resultado una nueva propuesta que involucra el elemento personal, reconociendo a las personas desde el ser, porque para nosotros “Ser HSBC” es tener la posibilidad de: cuidarte de manera consciente, ampliar tus horizontes, redefinir tus límites, dejar huella y conectarnos con el entorno.
Tenemos herramientas que ayudan a hacer tangible esta promesa, por ejemplo: consejería psicológica con líneas y procesos de atención a casos específicos; impulso a la equidad de género y la igualdad de oportunidades; diversos grupos de afinidad, periodo sabático, recursos de salud mental, etcétera.
Recientemente incorporamos una política que permitirá a nuestros(as) colegas tener un mayor número de días de los que establece la normativa laboral y que es diferenciadora en el sistema financiero, permitiéndoles estar más cerca de sus seres queridos en momentos importantes de su vida: el nacimiento o adopción de un hijo, el matrimonio o la muerte de un ser amado son partes esenciales del desarrollo de nuestras vidas y momentos que marcan nuestra historia personal.
Y, aunque las normativas laborales los consideran, nosotros ampliamos la oferta y lo hacemos con perspectiva de género: no solo las mujeres tienen derecho a una licencia por maternidad o adopción más larga; cualquier pareja que decida incluir a un hijo en su vida puede recibir estos beneficios. No importa si es madre o padre. Las personas hoy, corren roles diferentes en la nueva composición de las familias y eso es lo que entendemos, respetamos y valoramos.
Lo mismo sucede con las defunciones. Perder a un ser querido es un impacto determinante en la vida. Es por ello que establecemos tiempo para el luto, para que no solo sea la familia, sino la institución a la que se le da tiempo y trabajo, la que los abrace en esos momentos difíciles.
Esa es la manera en la que se hacen las empresas del futuro; siendo congruentes con los sueños y deseos de las personas. Estableciendo vínculos de confianza y promoviendo beneficios para que nuestra gente, nuestra familia laboral, crezca al mismo tiempo que nosotros. Con esto queremos asegurar que todos nuestros(as) colegas actuales y potenciales sepan, que, en los momentos importantes, HSBC está a su lado.
El autor (a) es Directora Regional de Recursos Humanos HSBC.