Diabetes: PiSA impulsa la prevención
- Escrito por Redacción
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En México, 1 de cada 4 personas que viven con diabetes presentan complicaciones en los pies. Las heridas o llagas que no cicatrizan pueden convertirse en ulceras infectadas, incrementando el riesgo de una amputación.
La Dra. Irma Luisa Ceja Martínez, gerente médico de Endocrinología y Nutrición de Grupo PiSA, afirmó que la diabetes es un padecimiento crónico que afecta a varios órganos del cuerpo y con el tiempo ocasiona cambios en la circulación, en el sistema nervioso y en la piel, por lo que es fundamental cuidar los pies.
“Los cambios que genera la diabetes crónica incrementan el riesgo de presentar heridas en los puntos de apoyo de la planta del pie, así como dedos y talones. Las lesiones se pueden complicar, rápidamente, ocasionando úlceras y hasta gangrena; a esta afectación se le denomina pie diabético”, detalló Ceja Martínez, especialista en medicina interna.
Cuando se vive con diabetes es importante mantener buenos hábitos de higiene y limpieza en los pies, usar zapatos cómodos para evitar heridas, así como acudir con frecuencia al podólogo.
Además, es necesario mantener un estilo de vida saludable y cumplir con el tratamiento que prescribe el médico. Todas estas acciones pueden hacer la diferencia y disminuir complicaciones del pie diabético evitando infecciones y amputaciones.
Una herida que no cierra es muy fácil que se infecte, se convierta en úlcera; ésta al crecer puede hacerse profunda y afectar tendones y huesos ocasionando osteomielitis. Una infección en los huesos es aún más complicada de tratar e incrementa el riesgo de gangrena y amputación.
De acuerdo con información de la Federación Internacional de Diabetes y la Asociación Americana de Diabetes (IFD y ADA, por sus siglas en inglés, respectivamente), las recomendaciones para cuidar y prevenir complicaciones en los pies son.
- Mantener buen control de la azúcar en sangre, de preferencia medirla con glucómetro.
- Cuidar que la alimentación sea nutritiva y variada, incluyendo en la dieta frutas y verduras.
- Ir al médico con regularidad, revisar los pies en cada visita y verificar control de peso, glucosa y presión arterial.
- Realizar exámenes clínicos de forma periódica: hemoglobina glucosilada, colesterol, triglicéridos y estudios que ayuden a evaluar la función renal.
Por otra parte, la ADA ofrece los siguientes consejos para mantener buenos hábitos en el cuidado los pies.
- Revisar e inspeccionar los pies, particularmente, el estado de la piel; callosidades, grietas y áreas resecas; además de detectar entre los dedos la presencia de hongos o humedad excesiva.
- Asear los pies con agua y jabón neutro cuidando que el agua no esté demasiado caliente. Es necesario verificar la temperatura con el codo o con la mano porque una persona con diabetes disminuye la sensibilidad y puede sufrir quemaduras.
- Secar los pies muy bien después del baño. Es muy importante que entre los dedos también quede la piel seca.
- Aplicar crema o aceite en los pies diariamente después del baño y del secado. No aplicar crema entre los dedos.