Jóvenes, en riesgo por el VIH

De acuerdo con el Centro Nacional para la prevención y el control del VIH y sida (CENSIDA), desde el primer brote registrado en 1983, hasta lo que va del año, se han reportado más de 190 mil casos de sida en México. 

Al respecto, el doctor Marco Banda, Medical Affairs Manager HIV en GSK, destacó –en el marco del Día Mundial de la Lucha contra el VIH/SIDA– que “los jóvenes no consideran las pruebas de detección dentro de sus evaluaciones médicas de rutina y, aun cuando se les ofrecen, las rechazan pues no se consideran en riesgo”.

“Se trata de una enfermedad silenciosa en las primeras etapas, cuando el virus infecta a una persona generalmente los síntomas son muy escasos, incluso inexistentes. Es hasta que el paciente está muy desgastado, meses e incluso años después de que se infectó, cuando acude por atención médica, por ello es de suma importancia realizarse pruebas de detección de manera rutinaria”, explicó el especialista.

Si bien no existe una cura para el VIH, existen tratamientos antirretrovirales que pueden disminuir significativamente la progresión de la enfermedad, alargar, mejorar la calidad de vida del paciente y disminuir el riesgo de contagio, “afortunadamente, hoy en día contamos con terapias que permiten al paciente tener una esperanza de vida muy similar a la que tenía antes de adquirir el virus”, mencionó.

Por su parte, el psicólogo Andrés Costilla, presidente de la Asociación Amigos Potosinos en Lucha Contra el SIDA, A.C., declaró que el reto más importante en nuestra sociedad es reducir el estigma y la discriminación hacia los pacientes que viven con VIH.

“Cuando una persona es infectada por VIH en automático adquiere un estigma, una marca negativa que no se puede quitar y a partir de esa marca es tratado de manera diferente. Desde hace más de tres décadas, los pacientes se han enfrentado a actos de discriminación dentro de los propios servicios de salud, en su trabajo y hasta en su núcleo familiar”, explicó Costilla.

El activista detalló que existen legisladores en diferentes entidades federativas que buscan tipificar como delito el peligro de contagio del VIH, en lugar de buscar recursos para impulsar acciones en materia de educación sexual, de prevención y detección temprana del VIH. “Nosotros, como asociación, buscamos empoderar a las personas que viven su día a día con VIH con herramientas y conocimientos para que sepan cómo actuar ante casos de estigma, discriminación o violación a sus derechos humanos”, resaltó.

En este sentido explicó que la asociación realiza continuamente actividades psicoeducativas y de prevención que incluyen la repartición de condones, lubricantes, pruebas de detección de Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) y la creación de estrategias en materia de adherencia, salud mental, calidad de vida y derechos humanos.

“Un paciente empoderado, seguro de sí mismo, puede mejorar significativamente su calidad de vida. Hay que quitarnos esos miedos y prejuicios en torno del VIH y trabajar en conjunto para reducir el número de contagios porque sin voluntad política y sin la participación activa de la sociedad, no es posible”, concluyó.

En cuanto a los avances científicos entorno al tratamiento de la enfermedad, el gerente de asuntos médicos del laboratorio farmacéutico GlaxoSmithKline, Marco Banda, apuntó que “sin duda aún queda mucho camino por recorrer en el campo de la inmunología y en el tratamiento de esta grave enfermedad; sin embargo, nuestra prioridad es el paciente y todas nuestras acciones como compañía están enfocadas a generar un impacto positivo en las personas con VIH para que puedan disfrutar de una mejor calidad de vida, por más tiempo”.