Internet: nuevas formas de abuso sexual
- Escrito por Redacción
- Publicado en Bienestar 24 horas
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Los 12 años es la edad promedio en que niños, niñas y adolescentes obtienen un dispositivo móvil propio con acceso a internet, con prácticas de riesgo entre 14 y 17 años que deben ser atendidas.
Así lo reveló el estudio: “Ser padre/madre de adolescentes en la era cibernética”, presentado por Guardianes y las empresas Lexia Insights Solutions y Netquest, especialistas en estudios de opinión en línea.
Entre algunos de los datos relevantes del estudio muestra que mientras que una tercera parte de los adolescentes conversa con desconocidos en internet, un 50% acepta haber conocido en persona a alguien contactado por esta vía, lo que representa una práctica de riesgo.
En sus redes sociales -que es el principal uso que dan a internet- 56% acepta a desconocidos como amigos. De este grupo, hay un 23% al que le gusta conocer a gente nueva vía internet, y un 8% que disfruta también de ganar seguidores y likes de gente que no conoce y que ve sus publicaciones.
En el marco de la conmemoración del 19 de noviembre, Día Nacional contra el Abuso Sexual Infantil, se destacó otro foco rojo en los hábitos de uso de internet por los adolescentes, como es el riesgo de compartir su ubicación en tiempo real, pues 25% de ellos tiene activo todo el tiempo el GPS de su dispositivo.
Hay que destacar que 9 de cada 10 (85%) padres y madres han platicado con sus hijos/as sobre el riesgo que corren al navegar en internet. Las recomendaciones que han dado para el cuidado de su integridad son principalmente no compartir información personal o confiar en desconocidos.
Pese a ello, la estadística muestra que 84% del contenido que suben los adolescentes a redes sociales, es información personal, entendiendo por estas fotografías personales, con amigos, en la escuela, su ubicación y actividades, información sobre regalos, compras y viajes.
Mientras que el 58% de las actividades que realizan al navegar implican un riesgo, actividades como conversar con desconocidos, ver contenido sexual no educativo, ver contenidos violentos, participar en retos peligrosos, ver contenido relacionado con el consumo de alcohol y drogas.
Estos riesgos también mantienen una relación con el horario en el uso de los dispositivos. Por ejemplo, si bien 69% los usan durante la tarde y la noche, hay un 11 % que también lo hace por la madrugada, horario en el que se ha detectado es más común el sexting, práctica en la que 2 de cada 10 adolescentes han participado por iniciativa propia, sin consecuencias graves según reportan.
Es importante señalar que del grupo de jóvenes de entre 14 y 17 años de edad que aceptaron haber practicado el sexting, un pequeño porcentaje (3%) reconoció que lo hizo bajo presión de alguien más, y en algunos casos con consecuencias como que el material se publicara en redes sociales.
Cifras oficiales de la Alianza Por la Seguridad en Internet (ASI) aseguran que el 8% de quienes se envían mensajes con fotografías sexualmente explícitas en México tienen entre 12 y 16 años.
Relación padres e hijos
El estudio también revela datos significativos en la relación entre padres e hijos cuando se trata de su vida en el mundo digital.
Uno de los hallazgos más importantes del estudio es que, aunque en apariencia existe una buena relación entre padres e hijos, pues 85% de los adolescentes consideran que sus padres confían en ellos, en lo que hacen y ven en línea, 5 de cada 10 ha ocultado a sus padres haber visto contenidos inapropiados como pornografía y violencia, fotos y publicaciones groseras.
Esto lo han logrado a través de bloquear a sus padres como usuarios, usar aplicaciones diseñadas específicamente para ocultar contenido, o creando un segundo perfil o cuenta alterna.
En cuanto a la confianza en el uso de las contraseñas, 71% de los jóvenes de 14 a 17 años de edad declaró que sus padres NO conocen las contraseñas de sus dispositivos y de sus redes sociales, mientras que, en el caso contrario, 29% de los adolescentes SI conoce las contraseñas de los dispositivos y redes de sus padres.
Sumado a esto, el reporte revela que 4 de cada 10 adolescentes no habla con sus padres, o casi nunca lo hace, sobre sus sentimientos, estados de ánimo e inquietudes.