Lactancia materna exclusiva, el reto

Destacado Foto: Cortesía. Foto: Cortesía.

Las políticas públicas dirigidas a los centros de trabajo son parte fundamental para garantizar la lactancia materna exclusiva, afirmó Anabelle Bonvecchio Arenas, directora de Políticas y Programas de Nutrición del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).

La leche materna es el mejor alimento y la opción más segura para garantizar la buena salud y el crecimiento. La evidencia es amplia al reconocer sus múltiples beneficios tanto para las madres, como para las y los bebés y la sociedad en su conjunto.

En entrevista, explicó que las licencias de maternidad y paternidad fomentan la corresponsabilidad en el cuidado de las infancias desde el inicio de su crianza, lo que promueve la distribución equitativa del trabajo al interior del hogar, permitiendo a las mujeres más tiempo disponible para amamantar, trabajar, estudiar o descansar.

En la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que se llevará a cabo del 1º al 7 de agosto con el lema: “Amamantar y trabajar: ¡hagamos que sea posible!”, la especialista del INSP dijo que estas políticas son importantes para la equidad de género en el mercado laboral y el hogar.

También puedes leer. Analizan desafíos de la lactancia materna. https://revistafactorrh.com/pareja-saludable/item/9891-analizan-desafios-de-la-lactancia-materna

Subrayó que incluir a los padres en las políticas de licencia, puede contribuir a una distribución más justa en el cuidado de la o el bebé. Además, la presencia del padre en los primeros días después del nacimiento puede favorecer el éxito de la lactancia materna al brindar apoyo emocional y práctico a la madre, dándole más tiempo para descansar y recuperarse físicamente.

En este contexto, la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) Continua 2022 refiere que 33.6 por ciento de bebés de seis meses recibió lactancia materna exclusiva; 27.2 por ciento de niñas y niños de 24 meses no la recibió durante los primeros tres días de vida, y fue alimentado con fórmula comercial infantil (FCI) u otro líquido, mientras que 42 por ciento, de entre seis y 23 meses, consumió alimentos no saludables.

La Ensanut concluyó que las prácticas de alimentación infantil en México deben ser protegidas mediante políticas que regulen la comercialización de fórmulas comerciales y promover un entorno laboral, social y político propicio para la lactancia materna y el cuidado infantil, para que madres, padres y cuidadores puedan adoptar prácticas de lactancia y alimentación complementaria adecuadas.

Anabelle Bonvecchio señaló que una de las políticas que más impacto tiene es la licencia de maternidad, que en México es de 12 semanas. Además, la Ley General del Trabajo señala en el artículo 170 que las madres trabajadoras tienen derecho a descansos extraordinarios por día para amamantar a sus hijos e hijas menores de un año y sin afectar el salario de la trabajadora.

Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) refieren que más de quinientos millones de mujeres trabajadoras en el mundo no se benefician de medidas de protección de la maternidad esenciales en la legislación de sus respectivas naciones; sólo 20 por ciento de los países exigen a empleadores ofrecer a las trabajadoras pausas remuneradas e instalaciones para lactancia o extracción de leche. Asimismo, menos de la mitad de las y los bebés de seis meses se alimentan exclusivamente de leche materna.

Bonvecchio Arenas, quien encabeza la línea de investigación en nutrición materno infantil en el INSP, señaló que debe promoverse que en los lugares de trabajo haya lactarios para extracción de leche, así como lugares específicos para amamantar.

Es fundamental dar a conocer a las madres trabajadoras sus derechos: acompañamiento, asesoría y flexibilidad laboral para continuar la lactancia materna; establecer un mecanismo y monitoreo para garantizar que se cumplen estos aspectos de la ley por parte de personas empleadoras.

Lo ideal sería extender la licencia de maternidad a seis meses para garantizar el período de lactancia materna exclusiva, o por lo menos pasar de 12 a 14 semanas, como lo establece la Organización Internacional del Trabajo (OIT), puntualizó.

También recordó que hay mujeres que laboran en el sector informal y no cuentan con licencia de maternidad, por lo que es necesario un programa social financiado con fondos públicos.

Modificado por última vez enLunes, 31 Julio 2023 06:53

Deja un comentario

Asegúrate de llenar la información requerida marcada con (*). No está permitido el código HTML. Tu dirección de correo NO será publicada.

logo-nosotros

RH Editores produce y comercializa la revista de Salud Factor RH. La edición es mensual.

Correo de publicidad: