Los cambios que el nuevo presidente de Estados Unidos Joe Biden está impulsando traerán beneficios directos a México en la política migratoria, la cooperación para lucha contra el crimen organizado y, en materia económica y laboral, para impulsar la relación comercial de ambas naciones. Por ello, en estos momentos resultaría muy perjudicial insistir en la eliminación del outsourcing.

La adecuada regulación del outsorcing facilitará que América del Norte se consolide como la principal región comercial del mundo, dijo Larry Rubin, presidente de The American Society Of México.

Los representantes de Estados Unidos del Partido Repúblicano, Larry Rubin, y del Partido Demócrata, Grincha Raether, advierten que la eliminación de la subcontratación, como lo plantea el Ejecutivo Federal, traerá graves consecuencias para la economía mexicana.

A tres meses de haber entrado en vigor, el T-MEC está en riesgo. Uno de los primeros reveses en la aplicación es que Richard Trumka, presidente de la Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales (AFL-CIO, por sus siglas en inglés), anunció el 3 de septiembre que presentará quejas contra México por algunos casos en los que el gobierno mexicano no está siendo capaz de aplicar los acuerdos del tratado comercial.

México no puede darse el lujo de no ejecutar los términos del T-MEC, ni de obstaculizar regresivamente los esquemas de tercerización usados intensivamente por sus socios comerciales.

La entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que arranca este primero de julio, será un aliciente que puede impulsar la economía, sin embargo, las dificultades son también de otra índole, principalmente en la estrepitosa caída del intercambio de bienes.