Sustancias psicotóxicas, efectos en la salud

  • Escrito por Dra. Daniela Flores Mosri, investigadora y docente de la UIC en la licenciatura en Psicología
  • Publicado en Opinión
  • 0 comentarios

El consumo de sustancias psicotóxicas ha aumentado de forma importante en los últimos años en el mundo, incluído México. Utilizar drogas se considera una conducta estadísticamente normal, sin embargo, desde una perspectiva de salud, difícilmente puede verse el contexto vigente como adaptativo.

El consumo de sustancias psicotóxicas, ya sean legales o ilegales, se acompaña de una serie de efectos indeseados inevitables que plantean el cuestionamiento de su uso.

Se reconoce un papel de ciertos aspectos genéticos y sociales, sin embargo, hasta ahora, el factor más marcadamente preocupante es un sentimiento de malestar interno constante en los consumidores, mismo que requiere de maniobras para aliviarle.

Los derivados de diversas plantas han acompañado al ser humano a través de su historia (Escohotado, 2002, 2005), sin importar las diferencias culturales, lo cual indica que hay fuertes motivantes para su consumo.

Dentro de ellas, se presenta la posibilidad de consumir una sustancia que pueda alterar el estado de ánimo y los contenidos del pensamiento, que en el caso de un consumidor de drogas es similar a ensayos por experiencia de auto-administrar sustancias hasta conseguir una mejora del estado subjetivo en un formato de automedicación (Khantzian, 1985, 1997, 2003) que fácilmente se confunde con un consumo meramente recreativo, cuando en la mayoría de los casos se encubren motivos clínicamente relevantes, tales como la presencia de depresiones latentes (Flores Mosri, 2017).  

De tal forma, se plantea que, visto desde sus causas concurrentes, la adicción se atribuye a la influencia de malas amistades, o a tendencias de moda, sin embargo, las causas de base suelen ignorarse, dificultando la apropiada prevención y tratamiento de los trastornos relacionados con el consumo de sustancias psicotóxicas.

El fundamento es claro: quien requiere modificar un estado subjetivo es porque no se siente bien. Ese malestar es el que necesita atención antes de que el consumo de las drogas se torne independiente de la voluntad del usuario.

La necesidad por abordar este complejo problema multifactorial es imperante. La investigación en el campo habría de enfocarse en las causas subyacentes al esperar un mejor resultado que el obtenido hasta el momento. Esperar a que el consumo se vuelva una dependencia para declarar la existencia de un problema es tardío.

El malestar crónico derivado de la forma de vida es parte de las razones para comprender el consumo de sustancias psicotóxicas, sin embargo, siempre es relevante revisar clínicamente (i.e. caso por caso) los aspectos que impactan en el síntoma de consumo y sus distintas causas.

El compromiso por atender la utilización de sustancias psicotóxicas debe ser oportuno y sensible. Nuestra cultura se encuentra en malestar.

Una vez rebasado cierto límite en el sistema nervioso, en particular en el circuito mesocórtico-mesolímbico de dopamina, encargado de la motivación y curiosidad en los cerebros mamíferos (Panksepp, 1998; Panksepp y Biven, 2012), la enfermedad adictiva se torna incurable y solamente tratable (Johnson, 2009). 

Modificado por última vez enViernes, 29 Junio 2018 06:51

Deja un comentario

Asegúrate de llenar la información requerida marcada con (*). No está permitido el código HTML. Tu dirección de correo NO será publicada.

logo-nosotros

RH Editores produce y comercializa la revista de Salud Factor RH. La edición es mensual.

Correo de publicidad: