¿Tienes un niño genio? aprende a guiarlo

Asdrúbal Almazán, padre de tres niños genios (Andrew, Delanie y Dafne), afirmó que su tarea ha sido de grandes retos para atender a sus hijos sobredotados, sobre todo por la responsabilidad de direccionarlos para que, además de ser inteligentes, se convirtieran en grandes seres humanos.

El doctor Asdrúbal Almazán, quien es director general del Centro de Atención al Talento (CEDAT), señaló que es un trabajo enorme, como padres, el tener en casa niños con un intelecto superior al de los demás.

“Son niños que pueden cambiar fuertemente al país en función a tener mejores profesionistas, investigadores, pero se les debe focalizar dentro de la familia con amor para su estabilidad emocional, como padres tenemos que enseñarles para que el día de mañana sean además de inteligentes personas estables psicológicamente”, resaltó.

Recordó que como familia él y su esposa se han enfrentado a situaciones de cómo atender a estos niños genio.

“Fue difícil cuando el primero de nuestros hijos tuvo un doble diagnóstico de sobre capacidad intelectual y al mismo tiempo Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH)”, dijo.

Admitió que la incógnita fue “qué hacer” con él, pero esta situación fue un parteaguas porque al mismo que nos dieron el diagnóstico de que Andrew padecía una patología del sistema nervioso dicen que es muy inteligente.

“Esa parte fue una gran incertidumbre porque no sabíamos qué hacer ni quién nos ayudaría a manejar la situación, nos enfrentamos a que no había nadie que nos pudiera ayudar, después tuvimos otras dos hijas son sobrecapacidad pero ya sabíamos cómo manejarlas”, afirmó.

Recalcó que con Andrew sintieron impotencia de no saber qué hacer pero con el paso del tiempo todo salió bien.

“Al inicio buscamos que nuestro hijo fuera normal, decidimos no buscar nada especial, pero fue un gran error encajarlo en un perfil que no era el de él porque nuestro hijo sufría, no tenía amigos y lo molestaban en la escuela”, dijo.

Destacó que fue todo un peregrinar porque acudieron, incluso, a instituciones fuera de México para encontrar una respuesta, “es una situación de tocar puertas y abrir un camino que no existía en el país, mi esposa y yo hicimos un master en educación para atender a este tipo de niños”, puntualizó.

Añadió que ahora los frutos son enormes porque tienen en casa a los tres psicólogos más jóvenes del mundo, tienen experiencias extraordinarias, aprenden de ellos y compartes sobremesa y vacaciones inolvidables y muy ilustrativas con sus hijos genios.

Andrew cursa actualmente un Doctorado en Innovación Educativa en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), cuenta con una maestría en Educación con Acentuación en Desarrollo Cognitivo, así como dos carreras profesionales: Medicina y Psicología.

A Dafne y a Delanie se les considera las psicólogas titulada más jóvenes en el mundo, desde pequeñas aprendieron otros idiomas y tienen conocimientos similares al de su hermano.

Al respecto, Asdrúbal insistió en que los sobredotados son como todos los niños pero aprenden más rápido, pero deben recibir un ambiente especial, convivir con niños igual, de acuerdo a sus conocimientos y avance intelectual.

Dio a conocer que de acuerdo a un estudio realizado en China se detectó que cuando hay un niño sobredotado existe un 70 por ciento de posibilidades que exista un hermano con las mismas características porque además de que se trata de una cuestión genética los menores aprenden de los mayores.

Agregó que abrieron las puertas del CEDAT para dar posibilidad a las familias con niños genio a tener una respuesta sobre qué hacer con estos seres que nacieron con un intelecto superior, para encauzarlos a que formen hijos sanos que puedan aportar al país y al mismo tiempo ser felices y equilibrados.

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