Tus pies son tu futuro

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Para evitar problemas en cadera, rodillas y columna en la edad adulta, a partir de los tres años de edad, se debe examinar anualmente el desarrollo adecuado de los pies, con el fin de detectar alguna alteración y corregirla.

La doctora María Dolores Enciso, médica adscrita al Servicio de Medicina Deportiva del Hospital Juárez de México, explicó que cuando se presentan problemas de pies planos o cavos, se altera toda la estructura ósea y el peso no se distribuye de manera adecuada al caminar. Este problema se complica entre los niños que tienen sobrepeso y obesidad.

Indicó que los pies son clave para tener una columna vertebral en buena condición, equilibrio, biomecánica y fuerza, por lo que la revisión se debe hacer en la etapa de crecimiento del niño. Reconoció que los pies son una de las partes del cuerpo que solo se le presta atención cuando manifiesta alguna molestia.

El chequeo médico debe efectuarse por un ortopedista, un médico de rehabilitación o del deporte, quien prescribirá los aditamentos adecuados que le permitan al niño tener un desarrollo normal. 

En caso de presentar alguna alteración, el examen se realizará semestralmente y se utilizarán plantillas que deben renovarse cada seis meses, debido a que los materiales sufren un desgaste y luego no surte el mismo efecto.

En entrevista, la doctora Enciso González destacó la importancia del cuidado de la salud de la columna hasta los pies, y presentó algunas recomendaciones para evitar que se presenten daños en la espalda.

Entre ellas aconsejó siempre flexionar rodillas para cargar objetos pesados y/o pegar la carga al cuerpo y trasladarla contrayendo el abdomen, para proteger la columna. Para el traslado de objetos, pidió no jalarlos de enfrente, sino detrás o al lado del objeto, y empujarlo con la fuerza de las piernas.

Enciso González destacó que por medio de esos cuidados se protege la columna y se evitan lesiones que pueden provocar distenciones musculares y dolor que limiten la movilidad.

Al sentarse, aconsejó hacerlo en una silla que permita apoyar la planta del pie en el piso. Los codos y los antebrazos deben de estar recargados en una superficie, para evitar lesiones.

“Cuando estamos trabajando frente a un escritorio y tenemos un aparato de computación, la visión debe de ser de 45 grados para no lesionar el cuello. La mano no se debe apoyar en el mouse, para que no se lastimen los nervios del antebrazo”, dijo.

Para costarse de manera lateral, se deben utilizar cojines o almohadas: una debajo de la oreja, otra entre las rodillas, -para que la cadera no caiga y estire los músculos de la columna-, y otra en los tobillos.

Recomendó no dormir bocabajo, debido a que esa posición lastima la columna lumbar y pueden producir algunos problemas en las raíces nerviosas.

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