Los problemas por no tener dientes
- Escrito por Redacción
- Publicado en Bienestar 24 horas
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Especialistas indican que un alto porcentaje de la población geriátrica presenta condiciones de salud oral bastante precarias, reflejadas en el hecho de que una de las condiciones con mayor prevalencia es la ausencia de todos los dientes o edentulismo total.
La odontóloga Silvia Montiel Sosa, que participó en el programa Recorrido por la Salud, dice que el edentulismo presenta una serie de problemas que pueden alterar la condición general de salud del paciente mayor. Inicialmente, dice, se presenta dificultad para fragmentar los alimentos por lo cual la persona se ve obligada a comer solo alimentos blandos, además de que el proceso se aumenta en cuanto al tiempo para triturar los alimentos antes de deglutirlos.
Indica que una de las funciones principales de los dientes es la masticación, considerada como fase inicial de la digestión, en donde los alimentos son fragmentados en partículas para facilitar su deglución y posterior absorción en el organismo. Se involucran además sentidos como el gusto, el tacto y el olfato generando un acto placentero en un apersona que tiene hambre.
En el caso de la persona edéntula, una vez que se deglutieron los alimentos, éstos no solo serán más difíciles de digerir en el estómago y a su vez en el intestino debido a que no fueron fragmentados adecuadamente, sino que además carecen de un alto contenido de fibra, por lo cual la persona tendrá mucho más riesgo de padecer problemas digestivos -como el estreñimiento- impactando su condición de vida y su estado general.
La especialista comenta que no solo la alimentación se ve alterada en las personas con edentulismo, también existen problemas musculares y de la ATM (Articulación Temporo Mandibular), la cual ayuda a poder mover nuestra mandíbula para llevar a cabo cualquier movimiento deseado de la misma.
“La alimentación es una actividad placentera que puede influenciar en el estado de ánimo de una persona, y para algunas de ellas el no poder comer cualquier alimento debido a la falta de dientes puede alterar su condición emocional y desarrollar un sentimiento negativo hacia la comida. Por otro lado, la falta de dientes hace que se altere la altura que existe entre el maxilar superior y la mandíbula (dimensión vertical), la cual disminuye ocasionando que se modifique la posición de la mandíbula en la zona donde se articula con los huesos del cráneo para sostenerla y generar sus movimientos”, asegura la odontóloga.
Menciona que, si consideramos que con la falta de dientes se alteró la dimensión vertical alterando la posición de la ATM, podemos entender que la mayoría de los pacientes edéntulos, además de no poder disfrutar los alimentos y generar alteraciones digestivas, también presentaran crepitación y chasquidos al mover la mandíbula, dolores musculares en la región oral, dolores de cabeza e incluso hasta mareos debido a la localización cercana de la ATM con el oído.
Cuidados:
v Acudir al odontólogo para dar tratamiento y mejorar la alimentación con una dentadura postiza.
v Preguntar al especialista sobre las medidas necesarias para una adecuada higiene bucal, así como que cepillos son los más indicados para las alteraciones que presentan.
v Incluir la revisión dental dentro de los chequeos realizados anualmente y en el caso de los pacientes con prótesis hacerlo cada seis meses para verificar el mantenimiento de la misma.
v Una persona con pérdida de piezas bucales pierde fuerza en la masticación por lo que requiere de alimentos más finamente picados para su consumo adecuado.
v En caso de que la pérdida de piezas dentales sea significativa y se requiera de una dieta blanda, es importante vigilar el consumo de fibra y en caso de ser necesario apoyarse de un suplemento de fibra.
Medidas preventivas
v Incentivar a los niños a estas revisiones periódicas para que sean informados del cuidado adecuado de las piezas dentales y de esta forma se prevengan o disminuyan las complicaciones en la edad adulta.
v Realizar revisiones Odontológicas periódicas, que ayuden a identificar riesgo o enfermedades en dentadura y encías en etas tempranas.
v Evitar alimentos cariogenicos (aquellos que promueven la formación de caries, tales como dulces, jugos, cereales y lácteos), sobre todo si no se tiene oportunidad de realizar el aseo bucal después de ingerirlos.
v Lavarse los dientes por lo menos tres veces al día o después de cada alimento, para evita la exposición a las bacterias presentes en los alimentos.
v Utilizar el hilo dental como herramienta para mejorar la higiene bucal.
Evitar el consumo excesivo de alimentos muy ácidos (pueden tener un efecto corrosivo) ya que estos pueden ocasionar pérdida del esmalte.